El acuerdo recientemente autorizado entre España y Georgia para el intercambio de permisos de conducir ha marcado un nuevo hito en la cooperación internacional en el sector del transporte. Tras el exitoso pacto con Marruecos, que eliminó el examen teórico para los conductores de camión y autobús, España amplía sus horizontes con la firma de este convenio con Georgia, que pronto será una realidad.
El objetivo principal de este acuerdo es facilitar la movilidad de los conductores españoles y georgianos que deseen conducir en el territorio del otro país una vez obtengan la residencia legal. Reconociendo la validez y homologación de los permisos de conducir emitidos por ambas naciones, se respeta la Convención sobre Circulación por Carretera y Señales de Tráfico de 1968.
En virtud de este nuevo pacto, los titulares de permisos de conducir vigentes en España o Georgia podrán circular en el territorio del otro Estado durante un período establecido por la normativa local, que en España es de seis meses. Pasado este tiempo, aquellos conductores que hayan adquirido la residencia legal en el país vecino podrán solicitar el canje de su permiso de conducir por uno equivalente, sin la necesidad de realizar pruebas teóricas o prácticas nuevamente.
Es importante destacar que esta homologación y canje se aplica específicamente a los permisos de conducir no profesionales. En el caso de los conductores profesionales de camión y autobús con permisos de conducir correspondientes, como C1, C1+E, C, C+E, D1, D1+E, D y D+E, se exigirá superar una prueba de circulación en vías abiertas al tráfico general para llevar a cabo el canje. Además, al igual que en el acuerdo con Marruecos, los conductores georgianos deberán obtener el Certificado de Aptitud Profesional (CAP) una vez realizado el canje, con la posibilidad de solicitud de una prueba teórica bajo circunstancias especiales.
Este nuevo acuerdo entre España y Georgia refleja el compromiso de ambos países por facilitar la movilidad de conductores y promover la cooperación internacional en el sector del transporte. Con la entrada en vigor próxima de este pacto, se espera una mayor integración y colaboración en términos de regulación y normativas para el beneficio mutuo de ambas naciones.